¡Hola a todos de nuevo! ¿Que tal estáis? En posts anteriores os hemos hablado de los diferentes tipos de pastas y pizzas que existen , y os hemos enseñado a preparar gnocchi de patatas; sin embargo hasta ahora, no os habíamos hablado de otro de los platos estrella de la cocina italiana: la lasaña. Por eso hoy, queremos que conozcáis un poco más de la historia de la auténtica lasaña italiana y que aprendáis a prepararla en casa.
Historia de la lasaña
La lasaña (lasagna en italiano), es un tipo de pasta que se sirve en láminas. Pero además de ser un tipo de pasta, también se conoce por este nombre al plato que seguro que todos conocéis, formado por láminas de pastas, intercaladas con carne, verduras y bechamel.
La palabra «lasaña» proviene del griego «lasanon«, a través del latín «lasanum«; que hace referencia al cazo en el que se cocinaba.
La lasaña se conoce desde hace muchos siglos. Ya el propio Cicerón, mencionó su pasión por » el Lagum», que eran tiras de pasta largas. Por ello, se cree que fue en esta época cuando los italianos crearon las máquinas para hacer pasta de lasaña. Sin embargo, no fue hasta el siglo XVII, cuando apareció un plato similar a la lasaña al horno que conocemos hoy en día.
Principales errores que podéis cometer y que harán que vuestra lasaña no esté buena
Para preparar una auténtica lasaña italiana, es tan sencillo como ir echando en un recipiente placas de pasta, e ir rellendolas con el contenido de ragú (a base de carne, verduras y salsa de tomate) y la bechamel de forma intercalada; hasta llegar a la parte superior en la que se echa queso para que se gratine.
Aunque puede parecer bastante fácil y es cierto que la lasaña no es un plato muy difícil de preparar, es posible que cometáis algunos errores que harán que vuestra lasaña no esté tan buena como debería. Para que no cometáis esos errores, a continuación os presentamos los más comunes, y la forma de solucionarlos , para que podáis cocinar la autentica lasaña italiana.
1. Bechamel con grumos
Si la bechamel tiene grumos, vuestra lasaña no saldrá como es debido. Para evitar que os aparezcan grumos en cualquier tipo de salsa solo debéis recordar una sencilla regla: «añadir los ingredientes líquidos (poco a poco) a los ingredientes secos» ¡NUNCA AL REVÉS!
2. Bechamel muy líquida
Para preparar un buen plato de lasaña, la bechamel no debe estar demasiado líquida. Para comprobar si tiene la consistencia deseada, lo más fácil; echar una cucharadita de bechamel en un plato e inclinarlo. Si la bechamel cae rápidamente, aún no tiene la consistencia adecuada.
3. Pasta de la lasaña dura y seca
Como os podréis imaginar, una parte esencial del plato son las láminas de pasta. Si éstas quedan duras y secas, vuestra lasaña será un desastre. Pero no os preocupéis, si hervís la pasta de la lasaña 2 minutos antes de comenzar a montarla, os quedará un plato perfecto.
4. Ragú demasiado líquido o ácido
Otra parte fundamental de la lasaña es su relleno, para ello debéis saber que para la preparación del ragú hacen falta al menos 2 horas para que alcance la consistencia perfecta, sino quedará demasiado líquido. Puede ocurrir también que, el ragú os quede ácido. ¡Que no cunda el pánico!; se puede solucionar fácilmente añadiéndole 1 o 2 cucharaditas de azúcar.
Consejos para que la lasaña quede deliciosa
Ahora que sabéis los errores que no debéis cometer a la hora de preparar vuestra lasaña italiana, os vamos a dar unos consejos para que vuestro plato sea delicioso.
– Debéis conseguir una bechamel que no sea ni demasiado líquida, ni demasiado densa.
–Para preparar el ragú; que como sabéis necesita al menos 2 horas de preparación, os aconsejamos que utilicéis carne fresca y una salsa de tomate casera.
– Para hervir las láminas de pasta, ya lo sabéis, 2 minutos antes de comenzar a montar la lasaña. Si en vez de comprar las láminas de pasta, las hacéis vosotros en casa sería mucho mejor. No os asustéis que es muy fácil, y seguro que gracias a nuestro post «como preparar pasta fresca en casa», ya sois todos unos expertos.
Variantes
Ya que la lasaña es un plato mundialmete conocido, existen infinidad de variantes diferentes; dependiendo de la región en la que prepare. Así, hemos ido evolucionando desde la lasaña italiana que está rellena de carne y salsa de tomate; hacia otras variantes como la lasaña de jamón y queso, la lasaña de espinacas o la lasaña de atún.
Para que conozcáis varias recetas de algunas de estas versiones de lasaña os dejamos el siguiente enlace, en el que encontraréis 12 formas diferentes de preparar lasaña: http://www.xn--recetalasaa-beb.com/
Pero aunque estas variantes están muy ricas, como la auténtica lasaña italiana no hay ninguna. Por eso aquí os dejamos la receta para que os animéis a prepararla.
Esperamos que os haya gustado conocer un poco más acerca de este delicioso plato. Os animamos a todos a que intentéis prepararlo en casa porque no es para nada difícil y esta delicioso. Para aquellos valientes que se animen, estamos seguros que os va a encantar; ¡Hasta pronto!