Para darle un buen recibimiento a nuestro mes favorito queremos hacer un post sobre la cocción de la pasta. ¿Cocer la pasta? Os preguntaréis… Sí, habéis leído bien. Aunque parezca algo bastante sencillo la verdad es que la mayoría de las personas no lo hacen adecuadamente, exceptuando, claro está, los italianos.

 

Y es que la pasta debe servirse al dente ¿y esto qué significa? Servirla un poco más dura de lo que aquí estamos acostumbrados, ya que en España solemos cocerla durante demasiado tiempo. El término «dente» nombra un punto de cocción en el que se nota una cierta resistencia de la pasta al ser movida. Por ello, aprovechando que en anteriores post ya os explicamos cómo elaborar pasta fresca en vuestra propia casa, pasamos al siguiente paso: cocerla.

Cómo hacer pasta al dente

Es bastante sencillo, basta con verter agua en una olla hasta llenarla un 70% de su capacidad y llevarla a ebullición.

Cuando el agua hierva echa la pasta (de 70 a 80 gramos si hay más platos en la comida y 120 gramos en el caso de que no haya ningún otro plato) y la sal. La sal es una parte muy importante del proceso, que dependerá de la cantidad de pasta y del agua que quede en la olla tras haber comenzado a hervir.

Para cuatro personas lo ideal es entre 4 y 6 pizcas de sal, tras unos minutos puedes probar si el agua esta sosa y en el caso de que lo necesites, añade más. También deberemos tener en cuenta la salsa con la que vayamos a aderezar la pasta, ya que dependiendo de ésta, añadiremos más o menos sal.

Os estaréis preguntando dónde está el aceite. Buena pregunta, aunque en España cocemos la pasta con agua, aceite y sal, para los italianos es algo impensable. Para ellos, no tiene sentido que mezclemos aceite con agua porque simplemente el agua pesa más, y esto hace que se forme una película de aceite en la parte superior sin ayudarnos a que no se nos pegue la pasta.

Posteriormente debemos dejar cocer la pasta a fuego medio.  Y en cuanto al tiempo de cocción, dependerá del tipo de pasta que estemos tratando. Como ya hemos dicho, comer la pasta al dente como buenos italianos supone comer la pasta un poco más dura de lo que estamos acostumbrados, por tanto si se trata de una pasta de marca italiana, solo tienes que seguir las instrucciones del envase, en el caso de una marca no italiana quita un 20% del tiempo de cocción aconsejado por el fabricante.

Por último, una vez pasado el tiempo de cocción, cuela la pasta con mucho cuidado, añádele tu salsa favorita y sírvela inmediatamente. ¿Por qué inmediatamente? Porque de lo contrario la pasta comenzaría a ablandarse y enfriarse. Si la volviéramos a calentar… no comeríamos pasta al dente como los verdaderos italianos.

¡Ahh! Se nos olvidaba, ¡los espaguetis no se parten! se echan al agua y se doblan poco a poco con una cuchara de madera.  Seguro que con estos consejos os convertiréis en unos verdaderos expertos de la comida italiana.